Este post contiene Versículos de Esperanza en la Biblia Reina Valera 1960, Y la esperanza no avergüenza, porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado.
Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis. (Jeremías 29:11)
Sino santificad a Dios el Señor en vuestros corazones, y estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros. (1 Pedro 3:15)
Encamíname en tu verdad, y enséñame, Porque tú eres el Dios de mi salvación, en ti he esperado todo el día. (Salmos 25:5)
¿Por qué te abates, oh alma mía, y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios, porque aún he de alabarle, salvación mía y Dios mío. (Salmos 42:11)
Sea tu misericordia, oh Jehová, sobre nosotros, según esperamos en ti. (Salmos 33:22)
Esperé yo a Jehová, esperó mi alma, en su palabra he esperado. (Salmos 130:5)
A quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre los gentiles, que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria. (Colosenses 1:27)
Pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas, levantarán alas como las águilas, correrán, y no se cansarán, caminarán, y no se fatigarán. (Isaías 40:31)
Y la esperanza no avergüenza, porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado. (Romanos 5:5)
Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo. (Romanos 15:13)
Mi escondedero y mi escudo eres tú, en tu palabra he esperado. (Salmos 119:114)
Un cuerpo, y un Espíritu, como fuisteis también llamados en una misma esperanza de vuestra vocación. (Efesios 4:4)
Esforzaos todos vosotros los que esperáis en Jehová, y tome aliento vuestro corazón. (Salmos 31:24)
Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos. (Romanos 8:25)
A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos. (1 Timoteo 6:17)
Gozosos en la esperanza, sufridos en la tribulación, constantes en la oración. (Romanos 12:12)
Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió. (Hebreos 10:23)
A causa de la esperanza que os está guardada en los cielos, de la cual ya habéis oído por la palabra verdadera del evangelio. (Colosenses 1:5)
Pues es esperanza al menesteroso, y la iniquidad cerrará su boca. (Job 5:16)
Porque no para siempre será olvidado el menesteroso, ni la esperanza de los pobres perecerá perpetuamente. (Salmos 9:18)
Y ahora, Señor, ¿Qué esperaré? Mi esperanza está en ti. (Salmos 39:7)
Susténtame conforme a tu palabra, y viviré, y no quede yo avergonzado de mi esperanza. (Salmos 119:116)
Esto recapacitaré en mi corazón, por lo tanto esperaré. Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. (Lamentaciones 3:21-22)
Que por esto mismo trabajamos y sufrimos oprobios, porque esperamos en el Dios viviente, que es el Salvador de todos los hombres, mayormente de los que creen. (1 Timoteo 4:10)
Porque tú, oh Señor Jehová, eres mi esperanza, seguridad mía desde mi juventud. (Salmos 71:5)
Volveos a la fortaleza, oh prisioneros de esperanza; hoy también os anuncio que os restauraré el doble. (Zacarías 9:12)
Los que te temen me verán, y se alegrarán, porque en tu palabra he esperado. (Salmos 119:74)
El cual nos libró, y nos libra, y en quien esperamos que aún nos librará, de tan gran muerte. (2 Corintios 1:10)
Porque no para siempre será olvidado el menesteroso, ni la esperanza de los pobres perecerá perpetuamente. (Salmos 9:18)
Y ahora, por la esperanza de la promesa que hizo Dios a nuestros padres soy llamado a juicio. (Hechos 26:6)
Él creyó en esperanza contra esperanza, para llegar a ser padre de muchas gentes, conforme a lo que se le había dicho: Así será tu descendencia. (Romanos 4:18)
Espera, oh Israel, en Jehová, desde ahora y para siempre. (Salmos 131:3)
Porque nada hay imposible para Dios. (Lucas 1:37)
Mas la que en verdad es viuda y ha quedado sola, espera en Dios, y es diligente en súplicas y oraciones noche y día. (1 Timoteo 5:5)
Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. (Hebreos 11:1)
Bienaventurado aquel cuyo ayudador es el Dios de Jacob, cuya esperanza está en Jehová su Dios. (Salmos 146:5)
Tendrás confianza, porque hay esperanza, mirarás alrededor, y dormirás seguro. (Job 11:18
Esperé yo a Jehová, esperó mi alma, en su palabra he esperado. (Salmos 130:5)
Espere Israel a Jehová, porque en Jehová hay misericordia, y abundante redención con él. (Salmos 130:7)
Así será a tu alma el conocimiento de la sabiduría, si la hallares tendrás recompensa, y al fin tu esperanza no será cortada. (Proverbios 24:14)
No se cansará ni desmayará, hasta que establezca en la tierra justicia, y las costas esperarán su ley. (Isaías 42:4)
Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos. (1 Pedro 1:3)
Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra. (Colosenses 3:1-2)
Alumbrando los ojos de vuestro entendimiento, para que sepáis cuál es la esperanza a que él os ha llamado, y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos. (Efesios 1:18)
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. (Juan 3:16)
Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna, y para que creáis en el nombre del Hijo de Dios. (1 Juan 5:13)
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